Introducción
El sistema de encamisado de manga continua y curado “in
situ”, utilizado en la rehabilitación de tuberías y bajantes, es una tecnología
que ha dominado el mercado a lo largo de los últimos 30 años.
Básicamente este sistema de rehabilitación de bajantes
consiste en la inserción por inversión de un fieltro de poliéster impregnado con
resina gracias al uso de aire comprimido, que empuja el material del encamisado
contra la pared interior de la tubería. Una vez colocada la manga se mantiene
la carga constante de presión de aire, iniciándose el curado a temperatura
ambiente.
Cabe decir que existe una variante de curado con este
sistema que utiliza la recirculación de agua caliente a través del interior del
encamisado de manga.
Propiedades del material de encamisado
El material del sistema de encamisado de manga continua
y curado por inversión térmica es una combinación de fieltro de poliéster y
resinas de poliéster o epoxi. Estos fieltros pueden venir pre-impregnados de fábrica
o realizar la impregnación “in situ” mediante sistema de calibración.
A continuación, nombramos las diversas propiedades que posee
el material de encamisado:
Aplicaciones del sistema de encamisado de manga continua
El sistema de encamisado de manga continua es de
aplicación en tuberías y bajantes, con diámetros comprendidos entre los
50 y 300 mm, fabricados con cualquier tipo de material: PVC, acero, cobre,
hormigón, cerámico y fibrocemento. Tanto en tramos verticales como horizontales
e inclinados.
Alcanza un rendimiento más elevado en bajantes pluviales
sin acometidas, aunque es posible su uso en bajantes residuales con
presencia de acometidas. Para dar continuidad a la red de saneamiento en estos
casos se deben abrir las acometidas cerradas con la ayuda de un robot fresador
de pequeñas dimensiones.
Descripción de la ejecución del sistema de encamisado
La ejecución del sistema sigue diferentes fases: Inspección
previa, limpieza, colocación, curado e inspección final.
Inspección previa
Para planificar correctamente los trabajos de
rehabilitación, debemos conocer previamente el estado del bajante a reparar,
así como tener identificadas y localizadas las patologías existentes.
Esta inspección se realiza con la ayuda de cámaras de
inspección CCTV de empuje. Su registro mediante grabación de vídeo nos ofrecerá
una visión en detalle del estado del bajante.
Limpieza
Antes de reparar la tubería debemos limpiar
primeramente el tramo de bajante para dejar libre el tubo de cualquier elemento
intrusivo. En función del grado de suciedad presente emplearemos diferentes
sistemas de limpieza. Durante este proceso de limpieza es importante utilizar
una cámara de inspección CCTV para comprobar en todo momento que la limpieza se
está realizando correctamente.
Colocación de la manga
Una vez hemos limpiado el bajante a rehabilitar,
colocaremos la manga en el interior del conducto. En el caso que se deba
impregnar “in situ” el fieltro de poliéster con las resinas, utilizaremos una
mesa de calibración para dar un espesor homogéneo a lo largo de la manga.
La manga se colocará en el interior del bajante por
inversión con la ayuda de la fuerza de empuje ejercida por la presión de aire.
Una vez colocada se procederá a dejar que cure la manga a temperatura ambiente
o bien por recirculación de agua caliente en algunos casos.
En el caso de existir acometidas, una vez ha curada la
manga, se procederá a su apertura mediante robot fresador eléctrico de pequeñas
dimensiones.
Inspección final
Una vez que hemos rehabilitado la tubería de saneamiento,
procedemos a realizar una inspección final para comprobar que la reparación se
ha ejecutado correctamente. Esta inspección se graba en vídeo como prueba del
resultado final.
Conclusiones
El sistema de rehabilitación de bajantes mediante
encamisado de manga continua es un método contrastado y utilizado hace más
de 30 años a nivel mundial.